El post de hoy va a ser muy especial, y la razón no es otra que la de poder hablar sobre uno de los mejores mangas que he podido leer desde que me gusta este mundillo. Si bien es cierto que ya hablé sobre este manga en el blog, ahora que (desgraciadamente para mi por que ya no podré seguir disfrutándolo) lo he terminado, me sentía en la necesidad de volver a hacerlo con un punto de vista renovado. Prometo que intentaré no hacer ningún spoiler para que todo el mundo pueda leerlo y conocer mi opinión con respecto a él y que no se le fastidie si está pensando leérselo.
En esta ocasión no voy a hacer lo mismo que suelo hacer en mis reviews de manga de poneros en situación describiendo la trama de la historia, dado que ya escribí sobre esta si deseáis saber más os recomiendo que vayáis a mi anterior post sobre mis primeras impresiones de Claymore, es más, si no lo habéis leído todavía os aconsejaría que lo leyeseis antes de empezar a leer este.
Puesto que no voy a hablar sobre la trama voy a empezar con mis impresiones, y lo primero que quiero decir es que superó sin duda mis expectativas del principio, si bien es cierto que en algún momento la acción se vuelve repetitiva en las batallas ya que todas son básicamente similares, y no le tienen ningún apego a los miembros de los personajes que los cortan y vuelven a unir una vez si y otra también, se soluciona (y de que manera) el problema que mencioné en el anterior post sobre los movimientos esquemáticos de los personajes, de hecho, había momentos en los que estaba tan metido en la historia, que si lo estaba leyendo mientras escuchaba música (cosa que hago a menudo) no me enteraba de que la música hacía tiempo que había parado! es increíble como el mangaka hizo una evolución asombrosa con el dibujo, porque no solo es esto, sino que cada vez creaba escenas mucho más bellas que hacen que te des cuenta del arte que poseen algunas personas con un simple lápiz. Esto le vino muy bien al manga en sus múltiples, y desgarradoras, escenas de tensión y drama. Creedme cuando os digo que hay momentos en los que este manga coge tu corazón lo espachurra contra el suelo y luego se divierte torturándote con él, y esto me lleva a una de las razones de por qué recomiendo encarecidamente este manga, y de por qué se ha convertido en uno de mis favoritos; y es que es el primer manga en mucho, muchísimo tiempo que ha conseguido hacerme soltar una mueca de "me voy a aguantar el llanto porque soy un hombre y los hombres no lloran". De verdad os digo que hay tres escenas en el manga que me han hecho querer llorar de pena y rabia. Esto es algo que ningún otro manga, aparte de One Piece, había conseguido hasta ahora, y eso es un mérito muy grande.
Otro aspecto en lo que mejoró el manga fueron los personajes secundarios, y es que en un momento de la historia no todo se centra en la protagonista Clare, sino que meten una amplia variedad de secundarios muy relevantes y que de verdad enamoran al público, o al menos conmigo lo hicieron. Sinceramente si no habéis leído el manga no sabréis de que hablo, pero yo soy fan de las siete fantasmas del norte, y aunque me costó por la cantidad de personajes de que hace gala este manga, al final conseguí aprenderme los nombres de todas y cada una de ellas, que era algo con lo que no quería quedarme después de haber leído el manga. Y también hablando de los personajes, he de decir que un hurra por los diseños de los "despertados" que según va avanzando la historia son cada vez mejores y más hermosos si cabe, y aunque sean los antagonistas de la historia ¡a la porra! ¿a quién no le gusta un buen malo? y si además está tan bien dibujado como estos pues mejor, puesto que en los diseños de las Claymore no se esmeró tanto, por lo menos que los malos sean impresionantes; y con esto no quiero decir que las chicas no estén bien hechas, al revés, el problema es que todas siguen un mismo patrón y no hay demasiada variedad, sinceramente parecen todas un grupo de muñecas barbie salidas de la cadena de montaje, pero la historia hace que las ames a todas y a cada una de ellas.
Si tuviera que hablar de algo que no me gusta, probablemente diría que para mi gusto el trasfondo religioso nunca ha sido mi fuerte, y aunque no hablan directamente de la biblia, se nota que la inspiración del artista viene de las historias de las sagradas escrituras, y de la eterna lucha entre los ángeles y los demonios, pero es tan buena la historia que esto apenas se percibe por lo que casi ni merece la pena mencionarlo, ahora lo que si me encanta son los nombres de los personajes, es uno de mis aspectos favoritos, ya que no usa nombres japoneses única y exclusivamente, sino que utiliza toda clase de nombres occidentales, incluso españoles cosa que me hizo bastante gracia, supongo que esto también viene influenciado por el tema religioso y su lengua matter el latín.
En cuanto al final, bueno, no voy a hablar mucho por no estropeároslo, pero las batallas finales contra el principal antagonista de la serie son una pasada, hasta que llega la batalla final, que es visualmente un 10, pero para mi gusto se queda algo flojilla en cuanto al tema feelings que destaca en el transcurso de todo el resto de capítulos, quizás yo me esperaba algo más emotivo y épico, aunque os aseguro que es bastante épico, y suple esta carencia de feelings con una sorpresa final que arrancará una sonrisa a todo el que esté realmente metido en esta historia al llegar a ese punto, creedme, a mi me ha pasado.
Estoy seguro de que hay muchísimas cosas que se me olvida mencionar, pero apenas acabo de terminar de leer el último capítulo y necesitaba compartirlo con todo aquél que quiera leer sobre mis opiniones, además no me gustaría mencionar algo que no debiera y fastidiaros la historia, lo mejor que podéis hacer es leerla vosotros mismos y deleitaros como acabo de hacer yo.
Si tuviera que ponerlo en un sitio entre mis mangas favoritos, yo creo que se llevaría el cuarto puesto, y pensaréis "¿Cómo le da solo el cuarto puesto tal y como habla de él?" la verdad es que comparte preferencia con el tercer puesto que es Dorohedoro, pero las cosas que decantan la balanza hacia este último son que con dorohedoro tengo una larga historia y mucho tiempo siguiéndolo mientras que Claymore me ha durado solo un mes (no podía parar de leerlo) y que prefiero los seinen a los shonen, eso es todo, y ya se que es una tontería pero son las dos únicas razones por las que podría decantar la balanza, por eso digo que en realidad están empatados, aunque quizás cuando se publique el final de Dorohedoro cambie de idea, habrá que esperar a ver. En cualquier caso mi nota sobre este manga es un 9 sobre 10 y no le pongo el diez porque me gusta ser un poquito cruel jeje. Os dejo con el diseño que más me ha gustado del manga y espero que hayáis disfrutado de mi post, de nuevo os recomiendo leer Claymore y me despido con un abrazo bichos mios, nos vemos over here!
P.D: La última imagen que muestro es un artwork que rescaté de internet de otro fan de la serie.
En esta ocasión no voy a hacer lo mismo que suelo hacer en mis reviews de manga de poneros en situación describiendo la trama de la historia, dado que ya escribí sobre esta si deseáis saber más os recomiendo que vayáis a mi anterior post sobre mis primeras impresiones de Claymore, es más, si no lo habéis leído todavía os aconsejaría que lo leyeseis antes de empezar a leer este.
Puesto que no voy a hablar sobre la trama voy a empezar con mis impresiones, y lo primero que quiero decir es que superó sin duda mis expectativas del principio, si bien es cierto que en algún momento la acción se vuelve repetitiva en las batallas ya que todas son básicamente similares, y no le tienen ningún apego a los miembros de los personajes que los cortan y vuelven a unir una vez si y otra también, se soluciona (y de que manera) el problema que mencioné en el anterior post sobre los movimientos esquemáticos de los personajes, de hecho, había momentos en los que estaba tan metido en la historia, que si lo estaba leyendo mientras escuchaba música (cosa que hago a menudo) no me enteraba de que la música hacía tiempo que había parado! es increíble como el mangaka hizo una evolución asombrosa con el dibujo, porque no solo es esto, sino que cada vez creaba escenas mucho más bellas que hacen que te des cuenta del arte que poseen algunas personas con un simple lápiz. Esto le vino muy bien al manga en sus múltiples, y desgarradoras, escenas de tensión y drama. Creedme cuando os digo que hay momentos en los que este manga coge tu corazón lo espachurra contra el suelo y luego se divierte torturándote con él, y esto me lleva a una de las razones de por qué recomiendo encarecidamente este manga, y de por qué se ha convertido en uno de mis favoritos; y es que es el primer manga en mucho, muchísimo tiempo que ha conseguido hacerme soltar una mueca de "me voy a aguantar el llanto porque soy un hombre y los hombres no lloran". De verdad os digo que hay tres escenas en el manga que me han hecho querer llorar de pena y rabia. Esto es algo que ningún otro manga, aparte de One Piece, había conseguido hasta ahora, y eso es un mérito muy grande.
Otro aspecto en lo que mejoró el manga fueron los personajes secundarios, y es que en un momento de la historia no todo se centra en la protagonista Clare, sino que meten una amplia variedad de secundarios muy relevantes y que de verdad enamoran al público, o al menos conmigo lo hicieron. Sinceramente si no habéis leído el manga no sabréis de que hablo, pero yo soy fan de las siete fantasmas del norte, y aunque me costó por la cantidad de personajes de que hace gala este manga, al final conseguí aprenderme los nombres de todas y cada una de ellas, que era algo con lo que no quería quedarme después de haber leído el manga. Y también hablando de los personajes, he de decir que un hurra por los diseños de los "despertados" que según va avanzando la historia son cada vez mejores y más hermosos si cabe, y aunque sean los antagonistas de la historia ¡a la porra! ¿a quién no le gusta un buen malo? y si además está tan bien dibujado como estos pues mejor, puesto que en los diseños de las Claymore no se esmeró tanto, por lo menos que los malos sean impresionantes; y con esto no quiero decir que las chicas no estén bien hechas, al revés, el problema es que todas siguen un mismo patrón y no hay demasiada variedad, sinceramente parecen todas un grupo de muñecas barbie salidas de la cadena de montaje, pero la historia hace que las ames a todas y a cada una de ellas.
Si tuviera que hablar de algo que no me gusta, probablemente diría que para mi gusto el trasfondo religioso nunca ha sido mi fuerte, y aunque no hablan directamente de la biblia, se nota que la inspiración del artista viene de las historias de las sagradas escrituras, y de la eterna lucha entre los ángeles y los demonios, pero es tan buena la historia que esto apenas se percibe por lo que casi ni merece la pena mencionarlo, ahora lo que si me encanta son los nombres de los personajes, es uno de mis aspectos favoritos, ya que no usa nombres japoneses única y exclusivamente, sino que utiliza toda clase de nombres occidentales, incluso españoles cosa que me hizo bastante gracia, supongo que esto también viene influenciado por el tema religioso y su lengua matter el latín.
En cuanto al final, bueno, no voy a hablar mucho por no estropeároslo, pero las batallas finales contra el principal antagonista de la serie son una pasada, hasta que llega la batalla final, que es visualmente un 10, pero para mi gusto se queda algo flojilla en cuanto al tema feelings que destaca en el transcurso de todo el resto de capítulos, quizás yo me esperaba algo más emotivo y épico, aunque os aseguro que es bastante épico, y suple esta carencia de feelings con una sorpresa final que arrancará una sonrisa a todo el que esté realmente metido en esta historia al llegar a ese punto, creedme, a mi me ha pasado.
Estoy seguro de que hay muchísimas cosas que se me olvida mencionar, pero apenas acabo de terminar de leer el último capítulo y necesitaba compartirlo con todo aquél que quiera leer sobre mis opiniones, además no me gustaría mencionar algo que no debiera y fastidiaros la historia, lo mejor que podéis hacer es leerla vosotros mismos y deleitaros como acabo de hacer yo.
Si tuviera que ponerlo en un sitio entre mis mangas favoritos, yo creo que se llevaría el cuarto puesto, y pensaréis "¿Cómo le da solo el cuarto puesto tal y como habla de él?" la verdad es que comparte preferencia con el tercer puesto que es Dorohedoro, pero las cosas que decantan la balanza hacia este último son que con dorohedoro tengo una larga historia y mucho tiempo siguiéndolo mientras que Claymore me ha durado solo un mes (no podía parar de leerlo) y que prefiero los seinen a los shonen, eso es todo, y ya se que es una tontería pero son las dos únicas razones por las que podría decantar la balanza, por eso digo que en realidad están empatados, aunque quizás cuando se publique el final de Dorohedoro cambie de idea, habrá que esperar a ver. En cualquier caso mi nota sobre este manga es un 9 sobre 10 y no le pongo el diez porque me gusta ser un poquito cruel jeje. Os dejo con el diseño que más me ha gustado del manga y espero que hayáis disfrutado de mi post, de nuevo os recomiendo leer Claymore y me despido con un abrazo bichos mios, nos vemos over here!
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